La acromioplastía por artroscopia es un método mínimo invasivo, debido a que se realiza por 2-3 incisiones de aprox 5 mm a 1 cm. Una de sus ventajas con el artroscopio es la visualización extensa del acromión y de estructuras nerviosas, vasculares y de tejidos blandos, aunado al incremento del alcance con los portales de trabajo. Además, con esta técnica preservamos tejidos importantes como el músculo deltoides, manguito rotador (MR) (en caso de no estar lesionado).
Si no es necesario la reparación del MR, la cirugía dura aprox 35-45 minutos.
El paciente puede irse a su casa el mismo día y su recuperación es notable casi de inmediato con un regreso temprano a sus actividades cotidianas.